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OPINIÓN

CRISIS QUE SE JUNTAN Y QUE PUEDEN DAR CURSO A GRAVES PROCESOS DE INESTABILIDAD EN TODO LA SOCIEDAD.   

Por Ramiro Guerra M.

Abogado y cientista político. 
Septiembre de 2023.       

Lo preocupante del título que encabeza este artículo de opinión es que muchos de los actores políticos no se dan por enterados. Peor, el gobierno que se justifica construyendo realidades virtuales o falsarias, lo único que ha logrado con esta práctica es enervar seriamente su legitimidad social.  

Laurentino en un inicio dió la impresión que su gestión, como gobernante, se aproximaría más a un centro político de naturaleza social democrática, con énfasis en  una politica de equilibrio y equidad. 

La percepción hoy es que no pasó de ser más que un gobierno de derecha, plegado a los Estados Unidos y a las élites del poder económico local e internacional.        

Hay un pueblo, cierto, ayuno de suficiente organización y unidad, pero con una gran molestia, hastío e inconformidad con el status quo.  Pero precisamente  es esta condición  la que le da a un evento o a varios, la posibilidad de propiciar saltos de calidad. En pocas palabras, la expresión de lo que se denomina  un salto catártico de la sociedad.       
Nuestro país está sumergido en un conjunto de subcrisis y todas sin encontrar pista de aterrizaje. Desigualdad marcada, crisis social profunda, un régimen con una bancarrota en su capital de legitimidad social, una democracia partidocrática agotada, una democracia que sólo funciona como fachada de prácticas excluyentes de una real y beligerante participación social,  desgaste serio del entramado institucional, temas de delincuencia que rebasan los mecanismos de control, etc...     

Toda esta realidad trasciende a la sociedad y a los panameños, las mayorías. Del  bloque de poder económico nada positivo se puede esperar. Constituyen parte sustancial del problema o problemas mencionados. Pierden de vista que esta crisis se le puede venir encima. 

Peligroso, en tanto la hístoria da cuenta que apelan salidas peores que las que han dado y dan lugar a lo que pudiera acercarse a un estado fallido. La nación no tiene liderazgo aunque resulta positivo lo que parece un proceso emergente de opciones que puedan hacer viable, nuevos rumbos en la forma de conducir el estado y la sociedad. Aunque todavía falta camino por andar.